Enfrenta Nuevo León riesgo de estancamiento industrial ante situación internacional

En el marco de los trabajos del Centro de Estudios Sociales del Noreste, el doctor Leonardo Torre Cepeda, economista del Banco de México, presentó un análisis sobre la evolución económica de México, con especial atención a la situación del estado de Nuevo León, haciendo una evaluación crítica de los datos recientes sobre actividad industrial, inversión extranjera y comercio exterior.

El doctor Torre inició su exposición revisando los indicadores de crecimiento económico nacional. Señaló una contracción entre el tercer y cuarto trimestre del año pasado, con una desaceleración evidente en las actividades del sector secundario. Esta tendencia, mencionó, es consistente con los datos de crecimiento intertrimestral, que apuntan hacia una economía prácticamente estancada.

Al abordar las exportaciones manufactureras, subrayó su importancia como termómetro de la actividad económica, sobre todo en estados con fuerte vocación industrial como Nuevo León. Observó una disminución sostenida en el crecimiento de estas exportaciones, particularmente en el sector automotriz, y anticipó que esta dinámica podría prolongarse.

En su revisión del caso específico de Nuevo León, Torre se concentró en los sectores que conforman la estructura económica estatal. Indicó que el sector terciario representa un 38.7% del total, mientras que las manufacturas abarcan el 35.4%. El resto corresponde a actividades primarias y otras ramas industriales. Destacó que las manufacturas continúan siendo un componente clave de la economía estatal, pero no mostró señales claras de dinamismo reciente.

La industria de la construcción, otro componente relevante del sector secundario, también fue objeto de análisis. Torre señaló que si bien ha tenido un papel importante en el pasado reciente, actualmente muestra señales de desaceleración, de acuerdo con entrevistas realizadas con empresarios del sector.

Durante el panel de preguntas, se discutió la saturación de parques industriales en Nuevo León. Participantes del sector privado mencionaron que muchas inversiones extranjeras no se registran oficialmente como tales, debido a que operan bajo modelos shelter, donde empresas nacionales representan a firmas extranjeras. Esto implica que el impacto económico real podría estar subestimado en las estadísticas oficiales.

El doctor Torre reconoció este fenómeno como una distorsión relevante para la medición de la inversión extranjera directa. Añadió que es un factor que el Banco de México ha comenzado a analizar con mayor profundidad, ya que tiene implicaciones en la lectura del comportamiento económico regional.

Respecto al fenómeno de relocalización de empresas, conocido como nearshoring, Torre indicó que si bien se ha dado una reinstalación de firmas previamente ubicadas en Asia, muchas de ellas se están estableciendo en Texas más que en México,lo que pone en duda la existencia del fenómeno conocido como “nearshoring”Aun así, reconoció que Nuevo León ha captado una parte importante de este movimiento, aunque sus efectos aún son difíciles de cuantificar con precisión.

En cuanto al sector servicios, mencionó que rubros como el turismo y el comercio aportan poco al crecimiento de la entidad. Indicadores como la ocupación hotelera han mostrado una recuperación modesta desde la pandemia, pero sin alcanzar un dinamismo que pueda considerarse motor económico.

Sobre las exportaciones automotrices, presentó una gráfica que mostraba una caída reciente. Explicó que este descenso ha sido parcialmente compensado por exportaciones no automotrices, aunque el saldo general es de bajo crecimiento. Subrayó que es importante no sobrestimar la recuperación de las exportaciones totales, pues el avance ha sido marginal.

Uno de los puntos más relevantes de la conferencia fue la advertencia sobre las finanzas estatales. Torre advirtió que las participaciones federales —los recursos que la Federación transfiere a los estados— podrían disminuir sustancialmente en los próximos meses, afectando la capacidad de gasto de los gobiernos locales. Mencionó que actualmente no existe un fondo federal que amortigüe estos impactos.

El análisis se amplió hacia los efectos de la geopolítica global. Se planteó la pregunta sobre si Nuevo León podría beneficiarse o no de la rivalidad económica entre Estados Unidos y China. Torre fue cauteloso al respecto, señalando que si bien hay oportunidades, también hay riesgos asociados a la dependencia de decisiones externas.

En ese sentido, se mencionó que el orden mundial está cambiando. Países como China, Japón y Corea del Sur han comenzado a explorar acuerdos de integración económica que hace pocos años eran impensables. Este tipo de alineamientos puede tener efectos significativos sobre las cadenas globales de valor, en las que México participa.

También se abordó la pérdida de influencia internacional de Estados Unidos. Algunos participantes señalaron que la reducción de su presupuesto en ciencia, educación y diplomacia ha debilitado su posición como líder global. Torre no se pronunció directamente sobre esto, pero reconoció que el contexto internacional se está volviendo más incierto.

La conferencia concluyó con una evaluación sobria: Nuevo León cuenta con una base industrial sólida, pero enfrenta señales claras de desaceleración. Las oportunidades ligadas al nearshoring podrían consolidarse en el futuro cercano, pero requieren políticas públicas claras, capacidad institucional y un seguimiento riguroso de datos. La incertidumbre fiscal y geopolítica es alta, y los márgenes de maniobra, limitados.