El alcalde de General Escobedo, Andrés Mijes, presentó ante el Consejo del Centro de Estudios Sociales del Noreste una exposición detallada sobre la visión de su gobierno y las principales políticas que ha implementado en el municipio. Mijes, con más de tres décadas de trayectoria en el servicio público, explicó cómo su administración ha logrado combinar la eficiencia operativa con un fuerte compromiso social, y cómo ha alineado su agenda local con los grandes objetivos nacionales, especialmente con la meta de reducir la desigualdad que impulsa la presidenta Claudia Sheinbaum. En su intervención, destacó la necesidad de que los municipios, al igual que el gobierno federal y los estados, tengan visión de Estado, rumbo definido y políticas estructuradas que perduren más allá de los periodos de gobierno.
Una de las ideas centrales de Mijes es que la mejor forma de construir un país más equitativo y funcional es desde lo local. Reivindica el papel de los alcaldes no sólo como administradores de servicios básicos, sino como actores estratégicos del desarrollo nacional. Para ello, ha estructurado su gestión bajo una ideología propia, que mezcla el humanismo mexicano del proyecto lopezobradorista con el capitalismo social impulsado históricamente por sectores empresariales. Esta fusión tiene como fundamento el reconocimiento de que el desarrollo económico no está reñido con la justicia social, y que un gobierno puede, al mismo tiempo, ser facilitador de la inversión y protector del bienestar colectivo. En palabras del propio alcalde: “Con la mano derecha generamos riqueza”.
Este enfoque se traduce en acciones concretas. Según el alcalde, uno de los logros más emblemáticos de su administración ha sido la implementación del permiso de construcción en cinco días, un trámite completamente digitalizado que, asegura, es único en el mundo por su velocidad y por estar respaldado en el reglamento de desarrollo urbano. Este proceso se gestiona a través de una plataforma tecnológica robusta, que permite monitorear en tiempo real cada expediente, desde su ingreso hasta su autorización. Los ciudadanos pueden subir sus documentos, recibir notificaciones, resolver observaciones y obtener licencias con firma digital, sin necesidad de acudir físicamente a las oficinas. La meta del gobierno es lograr la digitalización total de los 100 trámites municipales más relevantes antes de que termine el año, y eliminar la necesidad de firmas autógrafas en todo el sistema.
En el ámbito del desarrollo urbano, el gobierno de Andrés Mijes ha llevado a cabo una estrategia de crecimiento ordenado que ha tenido un fuerte impacto en la valorización del suelo. Zonas que hace apenas tres años valían 400 pesos por metro cuadrado, hoy se cotizan en 2,000 pesos gracias a la inversión en infraestructura, la planeación territorial y la apuesta por un modelo logístico-industrial. Esta revalorización no se ha dado al azar, sino como parte de una política deliberada de atracción de inversión y generación de empleos en zonas estratégicas del municipio. Además, se ha establecido como requisito para aprobar nuevos desarrollos habitacionales la reserva de suelo para infraestructura educativa en todos los niveles: preescolar, primaria, secundaria y preparatoria. Estos espacios no pueden ser vendidos ni transformados, pues están destinados por norma a fortalecer el equipamiento urbano.
El gobierno también ha sido pionero en políticas de seguridad con enfoque social. La estrategia local pone al policía en el centro del modelo de prevención, mejorando sus condiciones laborales con aumentos salariales anuales del 10%, y dotándolo de herramientas tecnológicas para dar seguimiento a los casos desde una plataforma digital interoperable. Pero la seguridad no se limita al patrullaje: también incluye un esfuerzo importante por reconstruir el tejido social, especialmente en zonas con altos índices de violencia familiar. A su llegada a la administración, las llamadas mensuales por este tipo de violencia eran de 475; hoy se han reducido a 125, gracias a una estrategia comunitaria que involucra a organizaciones como la Compañía de Jesús y liderazgos sociales locales. Un programa emblemático en este ámbito es Puerta Violeta, una institución multiagencial que atiende a mujeres víctimas de violencia con asesoría psicológica, legal y laboral, ofreciéndoles alternativas para decidir el futuro de su relación y su independencia.
En el área de movilidad y obras públicas, Mijes reconoció los desafíos derivados de la compleja distribución de competencias entre los tres niveles de gobierno. Muchas de las carreteras que atraviesan o rodean Escobedo, como la carretera Colombia, la Monclova o el libramiento a Laredo, son de competencia federal o estatal, lo cual limita la capacidad de acción del municipio. Sin embargo, su gobierno ha sido proactivo en gestionar recursos y proponer soluciones. Ha solicitado la municipalización de ciertos tramos para poder intervenirlos directamente, y ha trabajado en la elaboración de carteras de proyectos para gestionar financiamiento federal. Explicó que en una ocasión se aseguraron recursos por más de 400 millones de pesos, pero conflictos entre el gobierno estatal y el Congreso limitaron el flujo de esos recursos, afectando la ejecución de obras prioritarias. Aun así, recientemente se lograron obtener 80 millones más, y se mantiene la negociación con la federación para continuar los proyectos.
Un tema de interés especial durante la presentación fue la relación con el sector privado. Andrés Mijes dejó claro que los empresarios han sido sus mejores aliados para transformar Escobedo. Su gobierno mantiene un modelo de atención directa y resolutiva hacia la iniciativa privada, lo que ha generado confianza y atracción de nuevas inversiones. Sin embargo, también hizo énfasis en la corresponsabilidad social del sector empresarial. Por ejemplo, frente al reto de ofrecer guarderías para trabajadoras y trabajadores, propuso que en lugar de exigir que cada empresa abra una, se generen centros regionales o municipales que ofrezcan el servicio de forma compartida, facilitando su operación y reduciendo la carga para los empresarios.
Finalmente, Mijes insistió en que todas estas políticas deben trascender su administración. Por eso, ha iniciado un proceso de adecuación reglamentaria para que la digitalización, la transparencia, la calidad en el servicio y la planificación urbana se conviertan en políticas de Estado municipal. Esta institucionalización de las reformas busca evitar que avances logrados en una gestión sean revertidos por gobiernos posteriores sin visión o compromiso. Relató que en el pasado ya se han vivido retrocesos, como cuando una alcaldesa autorizó diez mil viviendas en una zona sin servicios ni planeación, sólo por interés político. Con este nuevo enfoque, el alcalde busca sentar las bases para un Escobedo más justo, ordenado y eficiente, capaz de crecer con inteligencia y equidad en las próximas décadas.